Finalmente llegó la tan anhelada lluvia, pero lamentablemente llegó aparejada con una potente tormenta que causó gran susto y prejuicio en gran parte del territorio nacional. La tormenta fue más fuerte que la propia lluvia.
Los fuertes vientos interrumpieron el sueño de los habitantes que tuvieron que dejar la cama para ponerse en guardia y poner en salvaguarda vehículos y otros enseres de la casa. Inmediatamente con los fuertes vientos se cortó el servicio eléctrico con los que se generó más pánico en la población.
Al igual que en las otras ciudades que alcanzó la tormenta, en Capiatá se reportaron varios destrozos. Árboles caídos, columnas tumbadas que terminaron con los cables sueltos, carteles desplomados, etc., Los bomberos voluntarios tuvieron una árdua en el auxilio de la gente y de sus bienes, desde el mismo momemnto que inició el fenómeno.
Cortes en el suministro eléctrico
Los cortes de luz afectaron a un aproximado de 300.000 usuarios de varios puntos del país, pero con la reactivación de los alimentadores, quedan aún unos 100.000 consumidores sin energía eléctrica, según reportó el funcionario.
La mayoría de los cortes se produjeron ya que el temporal y los fuertes vientos provocaron la caída de árboles y columnas que afectaron a las redes de distribución.
Las zonas más afectadas son el microcentro de Asunción, barrios Sajonia, Republicano, Villa Aurelia, Fernando de la Mora, Capiatá, San Lorenzo, Guarambaré, Villeta, San Antonio, Limpio, Mariano Roque Alonso, Itauguá, Luque, Lambaré, Villa Hayes, Altos entre otras.
Las ráfagas de viento alcanzaron velocidades de 120 km/h en Quyquyho, Paraguarí; en Encarnación, Itapúa, 114 km/h; en zona del Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi, Luque, 96 km/h, y en San Juan Bautista, Misiones, 91 km/h.
En San Bernardino, Cordillera: 90 km/h; Villeta, Central: 87 km/h; Villa del Rosario, San Pedro: 81 km/h; San José de los Arroyos, Caaguazú: 79 km/h; Caacupé, Cordillera: 76 km/h; 3 de Mayo, Caazapá: 76 km/h.